Aspectos beneficiosos que aporta a los estudiantes
Los beneficios del proyecto deben redundar en la mejora de la competencia matemática de los futuros estudiantes del Grado de Maestro. Teniendo en cuenta esto, conjeturamos los beneficios que pueden obtener los alumnos como consecuencia del desarrollo e implantación de las medidas que se desprendan del proyecto realizado.
1) Seguridad a la hora de afrontar las asignaturas del grado en Maestro en Infantil [Códigos 800295, 800296] y Primaria [Códigos 800432, 800441, 800447], Didáctica de las Matemáticas de Pedagogía [Código 800367] tanto a nivel cognitivo como procedimental.
Para cumplir este primer punto es necesario analizar los conocimientos matemáticos que alcanzan los alumnos que cursan alguna de las dos opciones de los bachilleratos vigentes que incorporan la asignatura de matemáticas en su currículo (Bachillerato de Ciencias y Tecnología y Bachillerato de Humanidades y Ciencias Sociales). Los alumnos que no hayan cursado matemáticas desde 4º ESO deberán reforzar sus conocimientos matemáticos para afrontar con garantías de éxito las asignaturas del Grado de Maestro, tanto en Educación Infantil como en Educación Primaria, así como del Grado de Pedagogía. El conocimiento de las asignaturas de matemáticas cursadas por los alumnos, así como de los contenidos que se imparten habitualmente, tanto en la Enseñanza Secundaria Obligatoria, como en el Bachillerato debe ser un buen punto de partida para trabajar con los alumnos. Dichos contenidos matemáticos deberían ser repasados en un “curso cero” para, de esta manera, crear en esta materia un clima de seguridad en los alumnos
2) Mejora de la competencia matemática.
En la mejora de la competencia matemática debemos tener en cuenta las siguientes competencias generales, propuestas por Pisa (OCDE, 2005, p. 40), pero aplicadas al ámbito de las matemáticas:
• pensar y razonar
• argumentar
• comunicar
• modelar
• plantear y resolver problemas
• representar
• utilizar el lenguaje simbólico, formal y técnico y las operaciones
• usar herramientas y recursos.
Para conseguir mejorar la competencia matemática dentro de las competencias generales que cualquier alumno debe tener al finalizar su etapa de secundaria y una vez detectadas las dificultades que estos muestran ante determinados concepto matemáticos, debemos realizar propuestas de formación a los futuros maestros que asegure una transmisión de conocimientos matemáticos funcional y un aprendizaje con comprensión de la materia que permita su aplicación en contextos dentro y fuera de la escuela.
3) Asegurar la competencia matemáticas en las futuras generaciones.
Uno de los beneficios del proyecto es poder asegurar la competencia matemática. Este hecho hace que las medidas que se desprendan de nuestro proyecto tengan que ponerse en marcha cada año para poder garantizar dicha competencia. Este proceso cíclico redundará en una mejor formación matemática que recogerá además toda la información relativa a como se han superado las dificultades mostradas durante el año anterior. Para ello será necesario diseñar una memoria final de cada materia que describa cuáles han sido las dificultades más notables, desde el punto de vista matemático, que se han puesto de manifiesto durante el desarrollo de la materia.
Bibliografía: OCDE (2005). Informe PISA 2003: Aprender para el mundo del mañana. Madrid: Santillana.