Antimilitarismo
La sensibilidad antimilitarista canalizó buena parte de sus reivindicaciones en la negativa a realizar el servicio militar obligatorio. El precedente de la insumisión se encuentra a finales del franquismo en el Movimiento de Objetores de Conciencia (MOC) que logrará en 1984 la aprobación de la Ley de Objeción de Conciencia, que ofrecía como alternativa al servicio militar la realización de una prestación social sustitutoria (PSS) de mayor duración que aquel. La protesta contra esta medida se encuentra en el origen del movimiento de insumisión a finales de los años ochenta, cuyo objetivo final era la desaparición del servicio militar obligatorio, contando con un amplio apoyo de la ciudadanía y un elevado coste político para los gobiernos de la época.