Autor: Raquel Valle Escolano

Universidad de Valencia

 

Autor: Iván Medina Iborra

Universidad de Valencia

 

Modalidad: Presencial

 

Abstract:

Las administraciones públicas españolas, a todos los niveles, llevan más de una década desplegando políticas de transparencia inspiradas en el Gobierno Abierto. Entre ellas destacan la publicación de las agendas de cargos públicos, la digitalización de los trámites administrativos, y la creación de registros de grupos de interés. El objetivo es, además de mejorar y agilizar los procedimientos y dinámicas internas, lograr una mayor implicación ciudadana en el control y seguimiento de la actividad institucional.

A pesar de las buenas intenciones, recientes estudios señalan que el despliegue de estas políticas es desigual. Además, la información que acostumbran a ofrecer las administraciones es difícil de obtener y de entender. Algunos autores señalan que las autoridades y burócratas siguen mostrando cierto rechazo a la idea de ser controlados, mientras que otros consideran que los factores estructurales marcan la diferencia.

Ante la imposibilidad de abordar el conjunto de políticas y de administraciones, en este trabajo nos centramos en cómo el Ayuntamiento de Madrid ha venido gestionando las agendas de cargos públicos entre los años 2018 y 2023. Este es uno de los consistorios más importantes del país, que cuenta con mayores recursos económicos y personales para la puesta en marcha de una verdadera política de transparencia, tan necesaria para una verdadera rendición de cuentas de los representantes municipales.

Aquí analizamos una serie de indicadores relevantes como son: la dificultad de obtención de la información, la falta de información completa, la existencia de fuentes de información no unificadas y dispersas, la falta de estructuración y accesibilidad universal, entre otras. Este análisis nos permitirá conocer cuáles son las divergencias existentes entre el cumplimiento formal de las obligaciones legales en la materia y la falta de transparencia real.