Número 17 (2017)
Revista Digital de Iconografía Medieval
Contenidos
- Aristóteles y la cortesana: iconografía del filósofo metafísico dominado por el deseo entre los siglos XIII y XIV
- Divinidades y vírgenes de cara negra
- El fruto del deseo: connotaciones sexuales de la mandrágora desde Egipto hasta la Edad Media
- Evolución iconográfica e iconológica del juicio osiriaco en la Edad Media
- La palmera y la palma. Adaptación medieval de una antigua iconografía
- La personificación del mar: evolución y transformaciones iconográficas del Mundo Clásico al Medioevo
- Número completo
Aristóteles y la cortesana: iconografía del filósofo metafísico dominado por el deseo entre los siglos XIII y XIV
Herbert GONZÁLEZ ZYMLA
Resumen: La historia de Aristóteles y la cortesana, llamada en unos relatos Phyllis, Filis o Campaspa, relata una historia totalmente inventada, concebida para ridiculizar al filósofo al que tanto se admiraba en el pensamiento escolástico de los siglos XIII, XIV y XV. Según este relato, Aristóteles habría reprendido a Alejandro Magno por distraerse en exceso con las cortesanas y mujeres de placer que vivían en el Palacio, dejando de atender a sus verdaderas obligaciones como hombre de estado. Phyllis decide entonces ridiculizar al preceptor del emperador haciendo que el padre de la Metafísica sea víctima de unos deseos físicos irrefrenables. Le seduce y le ofrece mantener relaciones sexuales plenas si se deja ensillar y montar como si fuera un caballo (poderoso símbolo de las pasiones) y la pasea por un jardín al medio día. Previamente, Phyllis ha informado a Alejandro del lugar en el que debe esconderse para ver cómo su maestro hace exactamente lo contrario a lo que predica. Alejandro, al ver a Aristóteles cabalgado, le pregunta: ¿Cómo ha llegado a esa situación? y su maestro, avergonzado, le contesta: “desconfiad del amor, que si de un viejo filósofo puede hacer un loco, a qué extremos no puede conducir a un joven príncipe”.
El relato y su iconografía se entendían en la Baja Edad Media y el primer Renacimiento como una advertencia contra la lujuria y las falsas filosofías que no preparaban al hombre para la muerte y la salvación del alma. Encierran, como buena parte de la literatura sapiencial medieval, una visión misógina de la mujer, habitual en el estamento del clero, en virtud de la cual, las féminas, con su belleza, someten a los hombres y los convierten en animales dominados por pasiones irrefrenables. La leyenda de Aristóteles y la cortesana, simboliza el poder de la lujuria y tiene por objeto ridiculizar aquello que es más merecedor de respeto: la Metafísica y su maestro, Aristóteles.
Palabras clave: Aristóteles; Alejandro Magno; Phyllis; Campaspa; cabalgar; látigo; fusta; dominación.
Divinidades y vírgenes de cara negra
Pilar GONZÁLEZ SERRANO
Resumen: Desde la más remota Antigüedad los meteoritos han sido objeto de veneración como piedras caídas del cielo (diopetes) y, por lo tanto, “cratofanías” (manifestaciones de poder) de la diosa madre. También se las llamó “piedras de rayo” y como columnas o betilos (beth-el), término semita que significa “morada del dios”, recibieron culto en numerosos templos o santuarios. Entre los casos más conocidos pueden citarse la “piedra negra de Pesinunte”, tenida por la diosa frigia Cibeles, o el sagrado betilo que, recubierto de oro, era la encarnación de la Ártemis Efesia. En la actualidad, el culto a los citados meteoritos pervive en la Kaaba de la Meca. El carácter sacro de las “divinas piedras negras” propició el hecho de que las primeras efigies de las vírgenes cristianas tuvieran el rostro y las manos negras o de color moreno, como muestra de su sagrada antigüedad. Dicha tez también se aplicó al Niño que aparecía en sus rodillas. Estas características se mantuvieron a lo largo de todo el Medievo, época en la que florecieron, tanto en Europa como en España, las llamadas “vírgenes de cara negra” que fueron, y aún son, objeto de la máxima veneración en iglesias, monasterios y santuarios.
Palabras clave: meteoritos; betilos; santuarios de montaña; vírgenes de tez negra o morena.
El fruto del deseo: connotaciones sexuales de la mandrágora desde Egipto hasta la Edad Media
Irene GONZÁLEZ HERNANDO
Resumen: En este artículo se analiza, desde el punto de vista iconográfico, el fruto de la mandrágora y su asociación con la sexualidad y el erotismo, así como su aplicación terapéutica en el terreno ginecológico. Contiene una primera parte dedicada a su presencia en Egipto, una segunda dedicada al ámbito grecorromano, y una tercera a la Edad Media, de modo que sea posible ver las conexiones entre la Antigüedad y el mundo medieval, y observar las reinterpretaciones de la tradición científica y artística a lo largo de la historia occidental.
Palabras clave: botánica; sexualidad; Dioscórides; mandrágora; arte.
Evolución iconográfica e iconológica del juicio osiriaco en la Edad Media
María Amparo ARROYO DE LA FUENTE
Resumen: El juicio de Osiris fue concebido como símbolo del tránsito del hombre a una nueva vida después de la muerte, pero también como un examen moral que determinaba el acceso a esa vida de ultratumba o bien la completa anulación mediante la destrucción de los componentes espirituales del ser humano. El emblema principal de esa prueba objetiva de la honestidad del finado fue la balanza, que también tuvo un profundo significado escatológico en el mundo heleno. El cristianismo primitivo adoptó este concepto e incluyó este elemento en las imágenes del Juicio Final, pero también vio en los platos de la balanza una alegoría con la que expresar la dualidad entre el cielo y el infierno, el Bien y el Mal.
Palabras clave: juicio de Osiris; Anubis; Juicio Final; san Miguel Arcángel; san Cristóbal.
La palmera y la palma. Adaptación medieval de una antigua iconografía
Ana VALTIERRA LACALLE
Resumen: La palmera y la palma, como síntesis de una parte por el todo, son símbolos omnipresentes en la iconografía medieval. Su origen lo podemos rastrear desde la antigüedad, momento a partir del cual se empezó a dotar a la palmera de unas connotaciones excepcionales que no tuvo ninguna otra planta. Unida a lo sobrenatural y como uia ad caelum conservamos referencias literarias e iconográficas que anclan sus raíces en el mundo griego. Planta indoblegable que sólo se inclina ante Cristo, símbolo supra-martirial y planta del Paraíso, se hace necesario rastrear origen de una tradición arraigada que se fue metamorfoseando y adaptando con el devenir de los tiempos. En este sentido, la época medieval fue fundamental, en tanto en cuanto reinterpretó estos iconogramas con un significado que sigue prevaleciendo a día de hoy.
Palabras clave: palmera; palma; iconografía medieval; mártir; Paraíso.
La personificación del mar: evolución y transformaciones iconográficas del Mundo Clásico al Medioevo
María Isabel RODRÍGUEZ LÓPEZ
Resumen: En el presente trabajo proponemos un recorrido por las imágenes que sirvieron como personificaciones del medio marino, desde la Antigüedad hasta la Edad Media, atendiendo muy especialmente a sus transformaciones iconográficas y semánticas. El arte occidental prefirió una personificación masculina, derivada de la imagen del Titán Océano, mientras que los artistas bizantinos optaron en la mayoría de los casos por asociar este elemento a la fertilidad de Tethis, concibiendo un mar femenino. Tomando como modelo prototipos idénticos, la diversidad de interpretaciones de Oriente y Occidente es clara evidencia de las analogías y disimilitudes existentes en el universo espiritual de estos ámbitos culturales que, no obstante, se retroalimentaron mutuamente.
Palabras clave: personificaciones marinas; mitología clásica; iconografía clásica; arte bizantino; arte clásico; tradición clásica.