Bilingüismo y decisiones morales
Autora: Dra. Eirini Mavrou
5 may 2023 - 16:21 CET
Tomar decisiones constituye una parte fundamental de nuestra vida diaria. Todos los días nos encontramos ante situaciones que requieren de nosotros opinar sobre un asunto, decidir si una acción es correcta o no y defender nuestro punto de visto frente al de otros. Algunas de estas decisiones son simples y apenas afectan a nuestro bienestar. Sin embargo, otras decisiones tienen un mayor peso y consecuencias más severas e incluso y pueden llevarnos a sentir culpabilidad, remordimiento, depresión o miedo. Es decir, la toma de decisiones comprende tanto procesos cognitivos como emocionales.
Asimismo, las decisiones que tomamos se ven influidas por las normas sociales y éticas, los valores y las creencias de la sociedad en que uno vive o ha crecido, la religión, el contexto cultural y variables relacionadas con el contexto específico en que dicho proceso tiene lugar. De la misma manera, sentimientos de culpa y remordimiento después de provocar daño emocional a otra persona podrían ser más notables en algunas culturas en las que se prioriza el colectivo y sus necesidades, la armonía social y el respeto hacia los demás y las normas, que en otras culturas en las que el bienestar del individuo y su propio desarrollo cobran mayor importancia.
Vivimos en un mundo globalizado en el que tomar decisiones en una lengua diferente a nuestra primera lengua (L1) no es solo un fenómeno muy común en el plano profesional y personal, sino que se convierte en una necesidad a fin de poder integrarnos de manera exitosa en las sociedades plurilingües del siglo XXI. Por ejemplo, en organizaciones internacionales como las Naciones Unidas o el Consejo Europeo, tomar decisiones en una segunda lengua (L2) es una práctica inevitable (Geipel et al., 2015a). Lo mismo sucede en otros contextos como el jurado, los colegios y escuelas bilingües, el trabajo (el inglés suele ser el idioma de los negocios) y las relaciones interpersonales (relaciones multilingües) entre otros.
En los últimos años, un creciente número de investigaciones ha comenzado a examinar como el hecho de ser bilingüe influye en la toma de decisiones, y particularmente en el razonamiento moral y las emociones que de este se derivan. En este contexto, el bilingüismo se entiende como la habilidad de comunicarse en más de una lengua de manera satisfactoria, es decir, no ser necesariamente bilingüe desde el nacimiento. Varias investigaciones hallaron que la lengua en que se presenta un dilema moral (L1 versus L2) influye en los juicios morales. Dicho fenómeno tomó el nombre de efecto del idioma extranjero (foreign language effect). En concreto, dichas investigaciones sugieren que, ante dilemas morales, los bilingües tienden a optar por la decisión más deontológica (y más emocional) en su L1, mientras que cuando el dilema se presenta en una lengua adquirida con posterioridad se tiende a tomar decisiones más utilitarias y, por tanto, más racionales (Geipel et al., 2015a, 2015b; Hayakawa et al., 2017; Kyriakou et al., 2022, entre otros).
Hasta el día de hoy, se han propuesto varias hipótesis para explicar por qué ocurre el efecto del idioma extranjero en relación con la toma de decisiones morales: (1) un procesamiento cognitivo más lento y controlado al usar una lengua adquirida con posterioridad y que lleva a la toma de decisiones más racionales; (2) una distancia emocional y psicológica a la hora de procesar dilemas morales en la L2; (3) una menor accesibilidad o procesamiento mental de las normas sociales y morales cuando la persona bilingüe toma decisiones en su L2 (véase, por ejemplo, Gawinkowska et al., 2013; Hayakawa et al., 2017; Pavlenko, 2012). Todo ello en realidad ocurre porque la L1, así como las reglas morales y sociales de la sociedad de habla de esa L1, se aprenden en contextos más emocionales y a través de interacciones sociales con personas que hablan la misma lengua y proceden de la misma cultura, a diferencia del aprendizaje de la L2 que suele tener lugar en contextos más neutrales o más artificiales.
Ahora bien, un alto nivel de bilingüismo (o de dominio lingüístico de la L2), su adquisición en un contexto altamente emocional (por ejemplo, en inmersión), o la afinidad lingüística entre las L1 y L2 hacen que el efecto del idioma extranjero vaya disminuyendo y que las personas (los bilingües) tomen decisiones morales similares en sus dos lenguas (Brouwer, 2021; Dyman & Champoux-Larsson, 2020). Lo mismo sucede cuando la L2 ocupa un papel central en el país donde los bilingües han crecido. Aunque este no es el caso común de España, sí lo es en países como Chipre, por ejemplo, donde el inglés tiene una presencia fuerte por razones históricas y políticas (Bongartz & Buschfeld, 2011).
Otro factor que se ha de tener en cuenta a la hora de evaluar los resultados de la investigación sobre razonamiento moral es el tipo de dilema. Es cierto que la mayor parte de la evidencia empírica procede de estudios que utilizaron dilemas morales poco realistas (por ejemplo, matar a una persona para salvar a cinco otras). En estos dilemas el efecto del idioma extranjero se ha comprobado en repetidas ocasiones. Sin embargo, los resultados de la investigación previa en bilingües no son tan consistentes cuando se utilizan dilemas más auténticos y basados en la vida real (por ejemplo, encontrar una cartera y devolver el dinero al propietario, cometer una infidelidad, etc.).
Ahora bien, a pesar de la fructífera investigación sobre este tema, existe un vacío sobre cómo la personalidad de los bilingües influye en sus decisiones morales en sus dos lenguas. Factores como la inteligencia emocional, la empatía, la identidad moral de las personas bilingües podrían estar jugando un papel importante a la hora de decidir si algo es correcto o incorrecto, juzgar las acciones de otras personas y sentir emociones fuertes como consecuencia de estas decisiones.
Aun así, la evidencia disponible tiene varias aplicaciones para la enseñanza de idiomas en una sociedad bilingüe e incluso plurilingüe. Entender cómo los bilingües toman decisiones – si es por mera intuición, puro razonamiento o una combinación de ambos – nos abre una ventana a su manera de pensar y probablemente a las estrategias que se puedan adoptar para encontrar un equilibrio entre razón y emoción durante el proceso de toma de decisiones. También, tiene implicaciones en el ámbito social a la hora de entender por qué algunas personas cometen transgresiones morales y ofensivas y su intención de actuar de una manera determinada dependiendo de la lengua que hayan usado. De la misma manera, la lengua en que las personas bilingües o multilingües leen o ven las noticias en la tele o través de las redes sociales puede influir en la percepción del grado de ofensividad de transgresiones morales y la penalización que propondrían al perpetrador.
Referencias
Bongartz, C. M., & Buschfeld, S. (2011). English in Cyprus: Second language variety or learner English? In J. Mukherjee & M. Hundt (Eds.), Exploring second-language varieties of English and learner Englishes: Bridging a paradigm gap (pp. 35–54). John Benjamins.
Brouwer, S. (2021). The interplay between emotion and modality in the Foreign-Language effect on moral decision making. Bilingualism: Language and Cognition, 24(2), 223–230. https://doi.org/10.1017/S136672892000022X
Dylman, A. S., & Champoux-Larsson, M.-F. (2020). It’s (not) all Greek to me: Boundaries of the foreign language effect. Cognition, 196, Article 104148. https://doi.org/10.1016/j.cognition.2019.104148
Gawinkowska, M., Paradowski, M. B., & Bilewicz, M. (2013). Second language as an exemptor from sociocultural norms. Emotion-related language choice revisited. PLoS ONE, 8(12), Article e81225. https://doi.org/10.1371/journal.pone.0081225
Geipel, J., Hadjichristidis, C., & Surian, L. (2015a). How foreign language shapes moral judgment. Journal of Experimental Social Psychology, 59, 8–17. https://doi.org/10.1016/j.jesp.2015.02.001
Geipel, J., Hadjichristidis, C., & Surian, L. (2015b). The foreign language effect on moral judgment: The role of emotions and norms. PLoS ONE, 10(7), Article e0131529. https://doi.org/10.1371/journal.pone.0131529
Hayakawa, S., Tannenbaum, D., Costa, A., Corey, J. D., & Keysar, B. (2017). Thinking more or feeling less? Explaining the foreign-language effect on moral judgment. Psychological Science, 28(10), 1387–1397. https://doi.org/10.1177/0956797617720944
Kyriakou, A., Foucart, A., & Mavrou, I. (2022). Moral judgements in a foreign language: Expressing emotions and justifying decisions. International Journal of Bilingualism. Advance online publication. https://doi.org/10.1177/13670069221134193
Pavlenko, A. (2012). Affective processing in bilingual speakers: Disembodied cognition? International Journal of Psychology, 47(6), 405–428. https://doi.org/10.1080/00207594.2012.743665