Presentación

Apenas dos meses antes del final de la Guerra Civil española, una marea humana compuesta por más de 500.000 individuos inundó las playas del sur de Francia. El Ejército Popular de la República había sido incapaz de poner fin al avance de las tropas rebeldes del general Franco, lo que se traduciría en la pérdida definitiva de Cataluña por parte de la II República y la constatación de que la contienda estaba perdida. El futuro, sin embargo, aún guardaba una tragedia aún mayor para varias decenas de miles de españoles.  

De todos aquellos que en febrero de 1939 lograron traspasar la frontera francesa, apenas un tercio consiguió evitar la repatriación, y de estos menos de la mitad estaba en condiciones de sostener su propia existencia. A fin de resolver la crisis, el gobierno galo optaría por tratar de reconvertir a todos los varones españoles aptos en combatientes de su propio Ejército, una medida que arrastraría a más de 60.000 combatientes republicanos a participar de forma directa en la Segunda Guerra Mundial. La rápida y humillante derrota infligida por Hitler a sus enemigos, sin embargo, dejaría un balance desastroso de más de 10.000 prisioneros españoles, a los que pronto se irían sumando nuevas decenas de deportados que serían paulatinamente entregados a Alemania hasta 1944. En total, algo más de 9.000 presos acabarían formando parte del sistema de campos de concentración alemanes. 7.000 lo harían en el complejo de Mauthausen, del que menos de la mitad lograría escapar con vida.

Con la publicación de la presente exposición virtual, ya expuesta al público en el marco de la Semana de la Ciencia y la Innovación del pasado año 2019, los miembros del GIGEFRA rinden tributo a la memoria de todos aquellos españoles víctimas de la deportación a campos de concentración nazis, con los que tanto la sociedad como la investigación están aún en deuda.

Madrid, 5 de mayo de 2020.

Día de homenaje a los españoles deportados y fallecidos en campos de concentración y a todas las víctimas españolas del nazismo