24 de marzo de 2022.

19:00h.

Universidad Complutense de Madrid

Salón de Actos de la Facultad de Bellas Artes

(c/ Pintor el Greco, 2)

Entrada con invitación

(Las invitaciones se podrán reservar aproximadamente unos días antes del concierto a través de la web)

Reyes Carrasco, hija de la cantaora María José Carrasco, es además descendiente de Joaniquín y de Curro Malena, su abuela paterna es de las Cabezas de San Juan, emparentada con los Carrasco de Lebrija y de Jerez.
A la corta edad de dos años, Reyes ya cantaba cuando apenas hablaba, tanto es así que con tres años se presenta a un casting televisivo y la eligen para entrar a formar parte de los niños artistas del programa Menuda Noche, en Canal Sur, donde ha compartido escenario con artistas de todos los ámbitos musicales, como David de María, Esperanza Fernández, Pitingo, José Mercé o Chiquetete.
Reyes no es asidua a los concursos, pero, aun así, a su corta edad ya posee multitud de importantes reconocimientos a su pasión por el flamenco como son los de Guillena, Candelea, los Palacios o La Unión, pasando a convertirse, en este último, en la artista más joven de la historia en conseguirlo; así como el premio de la Federación de peñas de Sevilla.
Además de convertirse en Palaciega del año 2015, en 2021 se le suma el reconocimiento con la Venencia Flamenca. También este mismo año se alza como la ganadora del gran concurso “Tierra de talento”, lo que genera un gran interés por parte de crítica y público. La joven cantaora ya es reclamada por multitud de festivales y peñas encabezando carteles de gran importancia. Recientemente, en mayo de 2021, fue galardonada como Artista Revelación dentro del Festival de Jerez, siendo la artista más joven en conseguirlo de la historia.
En su espectáculo, desde lo más profundo de su corazón, la joven cantaora Reyes Carrasco hará un recorrido por los cantes que ha ido aprendiendo desde la cuna. Con un gran apego por los cantes más ortodoxos, como ha dejado ver en sus apariciones públicas, la palaciega no se olvida del siglo en el que vive, y le aporta a cada palo un sonido actual, respetando siempre la base de este arte milenario. Reyes se mueve desde la seguiriya a los tangos, desde la mariana a la soleá, pasando por bulerías y alegrías, saliendo al escenario sin un guion determinado que asfixie su cante, y dejando a la inspiración que haga su trabajo en cada momento.