El 18 de enero se ha dado el pistoletazo de salida a la II edición del Programa Yuzz-UCM. Treinta y un jóvenes recibirán durante los próximos meses formación, apoyo y mentoring para tratar de hacer realidad sus 20 proyectos emprendedores, seleccionados entre más de 120 candidaturas. Hace un año las hermanas Laura y Elena Lorenzo Lominchar estaban en esa misma situación, iniciando su formación en este programa promovido por Santander Universidades, que se desarrolla en cerca de medio centenar de universidades e instituciones educativas de toda España. Laura y Elena querían dotar a Chargy, su proyecto, "la idea de mi vida", como señala Laura, del músculo necesario para convertirlo realidad. Doce meses después, y como destaca Laura, "en buena parte gracias a Yuzz", Chargy no sólo existe, sino que incluso es objeto codiciado por los inversores.
Se encendió la bombilla
Laura cuenta que todo empezó un día en una cafetería. Allí quedó para confesarle a un amigo lo desanimada que estaba con su trabajo. Era por la tarde y como suele suceder a esas horas la batería de su móvil estaba a punto de agotarse. Buscó dónde enchufar su cargador. No había enchufes cercanos. Tendría que pedirle el favor al camarero. En ese momento "se me encendió la bombilla". "Ya podría cargarse la batería con solo dejar el móvil sobre la mesa", pensó. "Comencé a darle vueltas a eso. No podía ni dormir. Tendría que ser una tecnología que permitiese hacer eso. La verdad es que no tenía ni idea de si existía o no. Pero yo iba más lejos, vi que podría ser un gran negocio. No sólo se trataba de un cargador de móviles sin enchufes, sino de cómo monetizar eso. A los pocos días se me ocurrió: para que funcionase habría que contestar unas pocas preguntas. Las empresas sabrían así cómo son sus clientes, qué buscan, qué quieren... Nosotros les venderíamos esa información".
Aprender a saber
Laura se lo contó a su hermana y contactó a su vez con su amigo Héctor Martínez Morell. El tenía experiencia emprededora. De hecho, había sido el ganador del Programa Yuzz de la Universidad de Sevilla pocos años antes. "La idea era muy buena -cuenta Héctor-, pero había que saber cómo hacerla realidad y que no quedara en un cajón". Entre las cosas que recomendó Héctor a Laura fue apuntarse al Programa Yuzz. Como su hermana Elena estudia en la UCM se presentó a la convocatoria del programa en la Complutense, donde precisamente se iba a organizar por primera vez. "También me presenté a la convocatoria por otras dos universidades y todas nos ofrecieron incorporarnos al programa, pero optamos por la Complutense por su nombre y su reputación, por supuesto, pero también por lo rápido y lo bien que me explicó y me tramitó todo la gente de Compluemprende", señala Laura.
Su paso por la primera edición de Yuzz, según valora Laura, no pudo ser más enriquecedor tanto por los conocimientos adquiridos, los consejos recibidos por su mentor, Aldo Castelli, como por los contactos que le permitió hacer. Elena, Laura y Héctor, "como asesor del proyecto", aclara, fueron designados ganadores del programa de la UCM, por lo que no sólo pasaron a competir en la fase final junto a los ganadores de los Yuzz del resto de universidades e instituciones, sino que por el solo hecho de clasificarse ya recibieron el premio gordo: una visita de una semana a Silicon Valley. "Fue algo increíble. Aprendí muchísimo. Volví con ganas de luchar por mi proyecto y comerme el mundo", comenta Laura con una enorme sonrisa.
A comerse el mundo
Y lo cierto es que se lo están comiendo. Chargy ya existe, como se puede comprobar en chargy.com y en su app para móviles, sino también en un buen número de restaurantes, hoteles y bares de cada vez más puntos de la geografía española e incluso del mundo, con la inclusión de un establecimiento en Ciudad de Guatemala. Explicado en pocas líneas, Chargy permite que los usuarios de los locales puedan cargar las baterías de sus móviles dejándolos sobre unos cargadores inalámbricos. Esta tecnología no es exclusiva, sino que está extendida por todo el mundo. Incluso se puede comprar en las tiendas. Chargy lo que ha patentando es un diseño de cargador que se empotra en las mesas. Para que éste funcione un emisor situado en el local debe enviar una señal. Esto lo hace cuando el cliente rellena una pequeña encuesta a través de la app de Chargy que se ha debido descargar en su smartphone. "Nosotros cobramos a nuestro cliente, que es el hotel, restaurante, etcétera, por la instalación de los cargadores y la antena y un mantenimiento por el envío de los cuestionarios. El precio depende del número de puestos de carga, encuestas enviadas...", explica Héctor, para quien "ahora estamos en un momento decisivo, ya que tenemos muchas propuestas de financiación. Nos han puesto mucho dinero sobre la mesa y tenemos que decidir con qué inversores nos quedamos". Antes de que esto sucediera, las hermanas Lorenzo y Héctor aportaron unos 30.000 euros para fabricar los primeros prototipos. Al equipo se han incorporado otras 4 personas, ingenieros e informáticos en su mayoría. Uno de ellos, Javi Campos, también fue ganador del Yuzz de su universidad, en esta caso la de Valencia,
La II edición, en marcha
La II edición del programa Santander-Yuzz se ha presentado el 18 de enero en las instalaciones del Centro Yuzz UCM, en la sede de Compluemprende del campus de Somosaguas. En el acto participaron José Manuel Pingarrón Carrazon, vicerrector de Transferencia del Conocimiento y Emprendimiento; María Begoña García Greciano, decana de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales; Alfredo Albaizar, director de Relacionales Institucionales de Santander Universidades España, y Paloma Bel Durán, directora de la Oficina Complutense del Emprendedor (Compluemprende).
Entre las ideas más innovadoras que se desarrollarán los próximos meses en el centro YUZZ UCM -seleccionadas entre más de 121 candidaturas- se encuentran una app para poder reservar tu billete en un jet privado, un carta virtual del restaurante desde la que podrás hacer el pedido de lo que quieres desde la mesa y podrás pagar la cuenta final, un sistema que optimiza tus apuestas deportivas, así hasta 20 grandes proyectos los que componen Yuzz UCM este año.
Al finalizar el proceso de formación, el joven con el proyecto mejor valorado del centro YUZZ UCM realizará un viaje a Silicon Valley, referente internacional en innovación y emprendimiento, donde accederá a foros de financiación, asesoramiento en internacionalización y contacto con inversores. Además, a su regreso de San Francisco, podrá optar a uno de los tres premios nacionales (30.000, 20.000 y 10.000 euros) para acelerar el desarrollo de su negocio. A su vez, el mejor proyecto del centro liderado por una emprendedora podrá optar al premio nacional YUZZ Mujer que gracias al apoyo de la Fundación EY ofrece 20.000 euros en financiación y el apoyo de los consultores de EY para acelerarlo.
El equipo de Compluemprende, dirigido por Paloma Bel, liderará el apoyo de la Universidad Complutense a este programa de promoción del espíritu emprendedor para jóvenes con ideas que será coordinado, en esta edición, por Juan Carlos Fernández Incera con el apoyo de las técnicos de Compluemprende, Esther Cubo Trenado y Pepa Casado Pérez.