por Manuel Sobaler Gómez

 

La pandemia ha sido un acontecimiento luctuoso que ha hecho temblar los cimientos de la economía y de la sociedad occidental, y en especial el modo de vida de poblaciones como la de España, donde su idiosincrasia, más cercana y abierta, se ha visto reprimida por la pandemia. Ha cambiado la forma de relacionarse, de divertirse, e incluso la forma de estudiar y trabajar. Muchos sectores han entrado en crisis y se prevén importantes cambios laborales y sociales.

Uno de los sectores más afectados y que se han encontrado en primera línea de batalla han sido los sanitarios, que a veces con escasez de medios, han tenido que luchar contra un virus desconocido y que ha estado a punto de colapsar el sistema sanitario con el consiguiente aumento de defunciones.

La entrevista ha sido realizada a la puerta del Hospital Clínico San Carlos en el distrito de Moncloa-Aravaca de Madrid. La mujer entrevistada es Elena Gómez Junquera, enfermera de 30 años, recientemente incorporada al servicio de urgencias del dicho Hospital.

Elena nació y estudió en Madrid, y que en estos momentos reside y trabaja en Madrid, así que nos permite tener la visión de la ciudad antes, durante y después de la pandemia. Mi objetivo es complementar con sus respuestas el conocimiento sobre todo aquello que la pandemia ha alterado en este 2020, en especial todo lo referente al drama vivido en las urgencias durante los primeros meses de la pandemia.

 

Uhm, bien y ¿cómo ha cambiado el barrio/el vecindario para usted y la relación con los vecinos? ¿Ha notado algún cambio trascendental debido al confinamiento?

Hombre, es que directamente no tengo trato con los vecinos, excepto con mi abuela que vive en el tercero; porque la mayor parte de mis vecinos sí que saben en lo que trabajo, pero tienden a esquivarme, por si acaso.

Sí, claro, es que tratándose de una enfermera en estos tiempos se ha producido cierto rechazo social a su profesión.

Pues sí, porque técnicamente somos héroes, pero héroes que nos quieren a distancia.

Héroes de lejos, luego de cerca son ustedes los “apestados” de la comunidad. (…) ¿Has encontrado otro uso de tu barrio, otras tiendas donde comprar, otros sitios donde hacer deporte, otra forma de ocio en relación a la ciudad?

A ver ahora sí que tiendes más a irte a los sitios más pequeños de los barrios, pero por ayudarles, más que yo que sé, ir a comprar a un gran sitio en plan Carrefour, Mercadora o cosas así. Irte a comprar la fruta a la frutería del barrio. Y la verdad es que yo siempre he ido a los bares del barrio porque me gusta. Pero sí que se nota que la gente tiende a ayudar al pequeño comercio.

Bien, ¿Cómo ves actualmente la situación en tu vecindario? ¿Y en los próximos años? ¿Crees que los cambios han venido para quedarse, o tienes esperanza en que esto en un par de meses esté solucionado?

Pues a ver no creo que sea la panacea la vacuna que van a poner ahora mismo, y que aguante un par de años más pues sí. También nos va a llevar a ser un poquito más consciente de que no somos inmortales y los virus nos pueden matar. Y nos va a venir bien porque también hay que decir que el Covid está ayudando en los hospitales, te puedo decir por experiencia mía, es que mucha gente de la que antes venía, estos años, por esta época, a empezar ya con las gripes, y demás, no lo está cogiendo. Ese boom de gripe, de tos, voy a malgastar el sistema, este año no está pasando, por lo que en parte nos está viniendo bien. ¿Qué va a durar?, pues yo creo que va a durar un par de años.

Me has dicho antes que os ha faltado material, en ese sentido ¿habéis notado cierto abandono o falta de apoyo institucional o de recursos?

(Piensa). Hombre, a ver, es que el abandono institucional y de recursos y demás se lleva produciendo años, lo que pasa es que de repente ha venido una pandemia y ha sido mucho más relevante ese abandono de la sanidad que ha habido por parte de todos los gobiernos que han pasado al final, porque tener que andar pidiendo batas o tener que ponerte una mascarilla que habías utilizado el día anterior, pues...

(…)

Si, eso es algo curioso, la gente ha normalizado la enfermedad, que tampoco es para vivir con histeria o pánico, pero habría que tener cierta preocupación no sólo ya por tu salud sino por la del resto, que no está sólo uno en el mundo.

Hombre, lo más preocupante es que se hayan normalizado los 300 muertos diarios, que es lo que pasa, que la gente lo ha normalizado, eso es lo preocupante.