Fernando Checa Cremades
Director del Museo del Prado de 1996 a 2001. Es doctor en Filosofía y Letras (especialidad Historia del Arte) por la Universidad Complutense de Madrid y licenciado en Derecho. En 1981 obtiene premio extraordinario de doctorado y en 1993 el Premio Nacional de Historia. En 1976 comienza a ejercer la docencia en la Universidad Complutense de Madrid, donde desde el año 1999 es catedrático. Ha sido Summer Visiting Professor en el Institute for Advanced Studies de Princeton, en 1988; Paul Mellon Senior Fellow en el Center of Advance Studies in Visual Arts de la National Gallery of Art de Washington, en 1989; Fae Norton Professor en la Oklahoma State University en 1995, y profesor visitante en la Universidad de Ginebra, en 2005. Como investigador ha participado en varios proyectos internacionales financiados por Francia, Austria, el Consejo de Europa y Estados Unidos. Destaca el Getty Grant Proyect para el estudio de los inventarios artísticos de Carlos V y su familia, financiado por la Getty Foundation y el Museo del Prado. Su campo de estudio abarca fundamentalmente el arte de la época del Renacimiento y el barroco, con especial dedicación al tema del coleccionismo y mecenazgo regio en la España de los siglos XVI y XVII, así como al de las relaciones artísticas de la monarquía hispánica con Europa en esta época. Entre sus publicaciones destacan: Pintura y escultura del renacimiento en España (1983), Carlos V y la imagen del héroe en el renacimiento (1987), La imagen impresa en el renacimiento y el manierismo (1.ª parte del tomo XXXI de la colección «Summa Artis», 1987), Felipe II, mecenas de las artes (1992), Tiziano y la monarquía hispánica. Usos y funciones de la pintura veneciana en España. Siglos XVI y XVII (1994), Las maravillas de Felipe II (1998), Carlos V. La imagen del poder en el renacimiento (2000) y El emperador Carlos v, a caballo, en Mühlberg, de Tiziano (2002). Ha sido comisario de distintas exposiciones dedicadas al arte de la Casa de Austria en España y el arte español del Renacimiento. Destacan: Reyes y mecenas. Los Reyes Católicos, Maximiliano I y los inicios de la Casa de Austria en España (Toledo-Innsbruck, 1992), El Real Alcázar de Madrid. Dos siglos de arquitectura y coleccionismo en la corte de los reyes de España (Madrid, 1994), Plantino. Dos siglos de relaciones culturales entre Amberes y Madrid (Madrid, 1995), Felipe II. Un monarca y su época. Un príncipe del renacimiento (Museo del Prado, 1998-1999), Carolus (Toledo, 2000-2001), Tiziano-Rubens, Venus ante el espejo (Madrid, 2002), Cortes del barroco. De Bernini y Velázquez a Luca Giordano (Madrid-Roma, 2003-2004) e Isabel la Católica (la magnificencia de un reinado) (Valladolid, Medina del Campo, Madrigal de las Altas Torres, 2004). Con el inicio de su mandato como director se modifica el decreto por el que se constituía el organismo autónomo Museo Nacional del Prado, reforzando el papel del Real Patronato y constituyendo su Comisión Permanente como órgano colegiado de dirección superior del Museo. Igualmente el decreto establecía el nuevo organigrama de división de las colecciones del Prado. Al inicio de su mandato dieron comienzo las obras de remodelación integral de las cubiertas del Museo, que concluyeron en 1999. En 1997 se aprobó el Plan Museográfico elaborado por él mediante el que se ordenaban las colecciones y se atribuían funciones a todos y cada uno de los edificios del Museo. De esta manera se aprobó finalmente su plan de ampliación en lo que se refiere al edificio en torno al claustro de la iglesia de San Jerónimo el Real y su conexión con el edificio de Villanueva, con un proyecto encargado a Rafael Moneo. La mencionada obra de las cubiertas del Museo permitió la apertura de nuevas salas, en ocasiones reformadas íntegramente, como las dedicadas a la pintura internacional del siglo XVIII y Goya (cartones para tapices y retratos) situadas en los áticos norte y sur del edificio Villanueva. Otras fueron nuevamente diseñadas: pintura flamenca del siglo XVII, Velázquez y pintura española del siglo XVII, Tiziano y pintura veneciana, pintura flamenca del siglo XVI, pintura italiana del Renacimiento y las nuevas salas de escultura en la planta baja. Durante estos años se incrementó notablemente la plantilla de conservadores científicos del Museo, responsables de las colecciones. Bajo su dirección se restauraron importantes pinturas del Museo como El caballero de la mano en el pecho, del Greco; Las tres Gracias, de Rubens; El jardín de las delicias, del Bosco; Carlos V en la batalla de Mühlberg, de Tiziano; La familia de Carlos IV, de Goya, restauraciones que, en la mayoría de los casos, se vieron acompañadas de simposios científicos de carácter internacional, publicaciones de estudios y catálogos y exposiciones. Igualmente se restauró buena parte de la colección de escultura clásica. El IV centenario de la muerte de Velázquez fue celebrado en el Museo del Prado con la exposición Velázquez, Rubens y Van Dyck. Pintores cortesanos del siglo XVII. Otras exposiciones importantes celebradas durante el periodo de su dirección fueron (además de la ya mencionada sobre Felipe II) Los cinco sentidos y el arte; Cathalonia. Arte gótico en los siglos xiv-xv; Caravaggio; Goya. La imagen de la mujer; Los niños de Murillo; Las colecciones reales españolas de mosaicos y piedras duras, etc. Son dignas de destacar las celebradas en las dos salas de dibujos del Museo, con una amplia serie dedicada a los dibujos y aguafuertes de Goya. En estos años el Prado vio incrementada su colección con obras tan importantes como La condesa de Chinchón y Vuelo de brujas, de Goya; La Huida a Egipto, del Greco; La caza de Diana, de Rubens, y Autorretrato en el estudio, de Paret y Alcázar.
Fuente: Enciclopedia Museo Nacional del Prado, Madrid.