Un correo electrónico fraudulento supone un punto de entrada para instalar malware en el equipo de la persona atacada a través de ficheros adjuntos, enlaces acortados engañosos o la redirección a un portal web que suplanta un portal oficial de confianza (de la UCM, Google, etc.).

En los últimos tiempos cada vez se reciben correos fraudulentos mejor confeccionados y que a veces vienen de remitentes que son de la propia UCM y cuya cuenta de correo institucional ha sido comprometida.

Si recibes un correo fraudulento que pueda afectar a la comunidad UCM o que el propio remitente sea una persona de la comunidad UCM, notifica esta situación enviando un correo a abuse@ucm.es.

Para que tengan información más detallada, puedes incluir el correo electrónico que te ha llegado como archivo adjunto, pero no reenviando ese correo, pues se pierde información de interés para el análisis del correo fraudulento. Si utilizas un gestor de correo como Outlook, Thunderbird, etc., éstos permiten desde el menú Archivo guardar el correo electrónico en formato .EML o .TXT en tu equipo. Si utilizas GMail tienes la opción de menú Mostrar original que te abrirá una pestaña separada con el contenido completo del mensaje y que puedes guardar (botón derecho, guardar como) en tu equipo. En ambos casos adjunta dicho archivo .EML o .TXT.