Aprovechando la celebración de la fiesta de Halloween, la biblioteca llevó a cabo una serie de actividades para llamar la atención de los usuarios y conseguir también una valiosa información sobre las posibles mejoras de nuestros espacios.

Se decoraron parte de los espacios públicos de la biblioteca, se realizó un ciclo de cine dedicado a Jaume Balagueró y se repartió una encuesta: cada alumno que la cumplimentaba y depositaba el impreso en la urna ubicada en el mostrador, era obsequiado con una bolsita de dulces. 

El análisis de la encuesta  nos ha permitido identificar con más precisión cuestiones que nos ayudarán a orientar nuestros proyectos de forma más certera. En particular, destacamos los siguientes resultados:

• Sólo el 42,86% del alumnado prefiere los puestos de trabajo convencionales. El 57,14% restante prefiere espacios de trabajo en grupo o áreas para socializar.

• El equipamiento que más demandan es, con diferencia, los enchufes. Lo pide un 55,56%.

• Al hilo de su interés por áreas mixtas donde sea posible trabajar a la vez que se estudia o socializa, los encuestados demandan espacios donde sea posible comer o beber. Junto a estos, piden por igual espacios heterogéneos diferentes al puesto de lectura tradicional: cabinas de aislamiento individual, espacios flexibles, salas de trabajo colaborativo...

• Apenas participan en actividades de la biblioteca, sólo un 15,39% ha participado en algún taller de la biblioteca, pero el 51,28% que afirma no conocerlas sí querría participar.

• La valoración que hacen del personal bibliotecario es muy positiva: el 94,74% considera que nuestra atención es excelente o muy buena.

Durante los cuatro días de la semana que duró la actividad, fueron numerosas las personas que expresaron su satisfacción con la iniciativa, y hemos visto cómo algunos grupos se fotografiaban con el “Espantaestudiantes” o en el “Cementerio de Economistas”.