Cámara clara SOFRINDO. Le Havre
La cámara clara o lúcida es un aparato portable que se puede acoplar al microscopio óptico para facilitar el dibujo de las imágenes observadas. Se basa en la camera lucida inventada y patentada por Wollaston en 1807. Inicialmente fue empleada por artistas y dibujantes en la recreación exacta de la perspectiva y hasta hace sólo unas décadas era un instrumento estándar del microscopista. Entonces la fotomicrografía constituía un medio caro y resultaba más fácil obtener una ilustración clara de lo que se quería mediante el dibujo. Muchas ilustraciones histológicas y microanatómicas de libros de texto y artículos se hicieron con cámara lúcida.
Las cámaras claras del Museo de la Geología vienen contenidas en un estuche marrón -interiormente forrado de terciopelo- con la inscripción “SOFRINDO. Le Havre” en dorado. Lleva un “espejo” rectangular (que puede girar) acoplado al “brazo” mediante un pieza que permite su desplazamiento a lo largo de éste. Dicho brazo está unido a la abrazadera que se fija al tubo del microscopio mediante un tornillo. La pieza metálica superior (articulada con la abrazadera) contiene a los prismas que van a reflejar la imagen y también unas piezas movibles con unos vidrios, que pueden interponerse en la trayectoria de los rayos para mejorar la luz sobre la superficie del dibujo. En la cara posterior del espejo está grabada la misma inscripción “SOFRINDO. Le Havre” de los estuches, que se corresponde con la empresa, hoy desaparecida, que la fabricó.
El funcionamiento de la cámara debe ser similar a la siguiente descripción, correspondiente a una cámara clara o lúcida Sartory de tipo Abbe. Esta tiene dos prismas rectangulares unidos por su hipotenusa DD". En uno de ellos, dicha cara está plateada, y funciona como un espejo, excepto en su parte central. A cierta distancia hay un espejo plano EE", giratorio. Desde A percibiremos la imagen del objeto microscópico gracias a los rayos centrales que pasan por ab, y al mismo tiempo, la imagen de la superficie de dibujo MM".
D. Eumenio Ancochea hizo entrega de seis cámaras claras “SOFRINDO. Le Havre” al Museo de la Geología en enero de 2011
Estas cámaras estaban depositadas en el Decanto de la Facultad de Geológicas y se desconoce su procedencia. Posiblemente fueron utilizadas en algún laboratorio de óptica donde pudieron estar adaptadas a los microscopios, para facilitar los dibujos y descripciones de los elementos observados por los estudiantes.