La ventana editorial de la Complutense

Abrirse al mundo desde un ventanal con vistas a todo Madrid. En Encuentros Complutense vivimos muy de cerca esa apertura editorial de la Universidad en la presentación de Ediciones Complutense en el Círculo de Bellas Artes. Abajo, en el escaparate de la librería: la pintura bajomedieval, Romeo y Julieta, Alfonso VIII y Leonor de Inglaterra, Lorca, optometría y estrabismo, arte y carne… -muy pronto se les unirá Goya. Arriba, en el encuentro (con Valle Inclán dándole nombre a la sala) una misión: “como editores universitarios debemos abrir nuevos espacios, protagonistas de docencia, investigación y extensión", explicaba Antonio López Fonseca, su director, y una necesidad también para el rector Carlos Andradas que veía “imprescindible la puesta en marcha de un sello editorial propio en una universidad como la nuestra. El leitmotiv es la calidad, unido a dar cabida a obras oportunas porque son perennes o porque arrojan luz en momentos en que hace falta”

Una luz que abarca planos diversos, el presidente del Círculo, Juan Miguel Hernández León, reivindicaba el libro como “un espejo y una apertura al mundo, un diálogo con uno mismo” y a la vez reconocía que “hoy en día sin un sistema de ediciones efectivo y sólido las universidades en los rankings tenemos muchos problemas”. En este sistema, Ediciones Complutense tiene vocación de “sello abierto a autores de la Complutense y otros centros nacionales y extranjeros”, anuncia López Fonseca, con obras “sometidas a un riguroso protocolo de selección y evaluación” y proponiendo caminos “para que lo que publicamos llegue al aula de forma eficiente”, continúa. En estos caminos, “aspiramos a ser una referencia en el mundo editorial académico. Es una editorial académica abierta a todos los autores con la única salvaguardia de que los textos sean de calidad”, añade Carlos Andradas.

Ediciones Complutense no renuncia a ningún soporte, por lo que no estaba de más debatir en su presentación sobre los dilemas entre libro impreso y digital con la periodista María Rey que confesaba consumir “mucho libro electrónico por impaciencia” pero estar a la vez fascinada por el libro impreso; con el director de Google Books, Luis Collado, que renegaba de la presentación de “ambos formatos como la lucha del ebook y el libro en papel” y que apostaba porque “lo importante es que al final haya más gente que lea” y con el escritor e historiador José Álvarez Junco que lo contempla como “la revolución más importante que he vivido, yo empecé mi tesis doctoral copiando libros a mano”.

Una revolución que para Junco “está en la competencia entre imágenes y letras y a los jóvenes les interesa más el mundo de la imagen que el de la lectura” y en la que Collado resalta que “nunca se ha leído tanto, pero quizá de forma diferente: picoteo, pantalla…”. El ejecutivo de Google augura que “si nos quedamos con el libro como objeto, mal vamos. Si nos abrimos a la tecnología hay una oportunidad”; mientras, el profesor Álvarez Junco confía en que “la humanidad seguirá creciendo”, afrontando retos.

Fecha: 25 octubre 2017, 19 horas
Lugar: Círculo de Bellas Artes de Madrid. Sala Valle Inclán

Intervienen: Carlos Andradas (rector UCM), Juan Miguel Hernández León (CBA), Antonio López Fonseca (Ediciones Complutense), María Rey (Antena 3Tv), José Álvarez Junco (UCM), Luis Collado (Google Play Books), Javier Moreno Luzón (UCM), Antonio María Ávila (FGEE), Elea Giménez Toledo (CSIC), Belén Llera Carreño (Ayuntamiento de Madrid) y Javier Pascual Echalecu (MECD)
Presentación en @EdiComplutense  y @encuentrosUCM  #EdiComplutense

El reto para la edición académica, y en concreto para Ediciones Complutense, es que “el trabajo sea de la máxima calidad en cada uno de los ámbitos de conocimiento”, indicaba el historiador Javier Moreno Luzón al iniciar el segundo debate El libro académico en el siglo XXI, partiendo de la base de que “presentar una editorial es un fiesta y casi un milagro”. Editoriales que afrontan mercados como el norteamericano en el que “tenemos un problema de imagen” apunta Antonio María Ávila (director ejecutivo de la Federación de Gremios de Editores), “no ubican la edición española en un valor científico”.

Para la investigadora del CSIC Elea Giménez (Grupo ILIA), “en las estadísticas los libros están ausentes de los informes y la producción académica existe en forma de libros, urge su reconocimiento”. “Los editores no están haciendo un buen uso de los metadatos. Necesitamos conocerlos bien para comercializar el libro académico”, añade. Sobre el futuro apunta el fenómeno de “editoriales universitarias que nacen directamente como Open Access (acceso abierto), con el soporte financiero de las universidades y la idea de obtener un retorno a largo plazo. No con rentabilidad económica”, pero sí con el resultado de convertirse en referente. “Es interesante seguirlo”, nos propone Elea, que revela también una transformación pareja “del rol de los bibliotecarios”.

Esta segunda mesa contaba precisamente con Belén Llera, directora de Bibliotecas del Ayuntamiento de Madrid, que reconocía que “si hablamos de producción editorial académica estamos hablando de investigación y sabemos que es una carrera de obstáculos”. Llera explicaba que “este año hemos lanzado unas becas de investigación relacionadas con las áreas de la Memoria”. Aunque “las estadísticas destacan que se lee más que hace 10 años”, esas mismas estadísticas carecen de información sobre el libro académico, “estamos en un sector en que no existe casi información, las estadísticas se basan en la materia, pero no en el enfoque” (académico, ensayo, etc.), señala Javier Pascual subdirector general del Libro (MECD). En torno al libro académico, Pascual indica que “producimos más pensamiento del que leemos” y prevé para el futuro que “la autoedición entrará de forma más lenta”. Por el momento, Javier Pascual dibuja gráficamente este panorama: “una marca de automóviles recibe más ayudas que todo el sector editorial de España”.

Texto: Celia Sánchez   Fotografía: Borja Jaume
25 de octubre 2017 #EdiComplutense

La investigación y la docencia, la universidad en definitiva, cuentan desde ahora con un nuevo sello editorial. Ediciones Complutense realiza su presentación tras un año de trabajo en el que, entre otros, han visto la luz títulos como Goya y sus críticos (y otros ensayos) –el libro que cambió los estudios sobre Goya–, El Libro de Nishán la Samán –un relato manchú medieval­–, Mecánica y Ondas. 100 problemas resueltos o La gran aventura del cristal –la gran obra sobre Cristalografía en español–, rigurosas publicaciones tan variadas como atractivas.

Con este proyecto la Universidad Complutense de Madrid apuesta por la actividad editorial como instrumento de transmisión del conocimiento y difusión de la cultura. Por eso, Ediciones Complutense quiere que su presentación aborde también temas cruciales para el futuro de la edición: la coexistencia de soportes tan diferentes como el papel y la edición electrónica o el sentido y la importancia de la edición académica y especializada en el siglo apenas comenzado. 

Las líneas editoriales de Ediciones Complutense se centran en la investigación –incluidas las revistas científicas–, la docencia, la divulgación y difusión cultural y la actividad institucional de la universidad. Se trata de un sello abierto a cualquier autor que quiera presentar sus proyectos al proceso de selección y evaluación. Para conocer todos los títulos publicados o presentar propuestas, Ediciones Complutense dispone de una amplia información en www.ucm.es/ediciones-complutense.